A unos 780 km hacia el sur de Santiago se encuentra Pucón, un maravilloso lugar carente del smog y esa locura citadina
que suele caracterizar a las grandes ciudades y que me saca de mis casíllas de la cual no soy particularmente
adepta. El olor a leña calentando los hogares de esta gente es embriagante y su ubicación es realmente privilegiada.
En Pucón viven unas 25.000 personas y todo es de madera (incluyendo los letreros y señalizaciones) y a tan solo 14 km en dirección sureste descansa el volcán de Villarica, el responsable de brindarte la mejor y más hermosa vista que podrias soñar tener en cada amanecer y puesta de sol de tu vida. Este volcán, cuyo nombre en Mapuche es Rucapillan (algo así como casa del demonio), es uno de los más activos de Suramérica y tiene una altitud de 2847msnm hasta su crater. Su forma cónica perfecta y su aspecto imponente cubierto de nieve y hielo (con más abundancia en los meses de invierno) es de esas pequeñas cosas que dudo pueda olvidar jamás.
A Pucón se puede llegar por tierra en varias líneas de autobuses, en el terminal de la alameda hay para escoger. El viaje dura unas 10 horas así que les recomiendo el asiento más cómodo que suele ser un poco más costoso pero que les asegura llegar felices y no con parte de su anatomía hecha una tabla. La otra manera es por avión, pero el aeropuerto de Pucón sólo abre en temporada alta (de diciembre a febrero). La otra alternativa para el resto del año es tomar un vuelo hasta Temuco, pero allí tendrían que tomar un transfer por aproximadamente una hora que los traslade hasta Pucón. Es cuestion de gustos.
En cuanto al alojamiento por lo general las opciones son para morir de amor. Hay variedad de hostales y cabañas acogedoras, desde lo barato a lo más fancy, todo dependiendo de lo que tu bolsillo pueda pagar. Les recomiendo (sobre todo si van en temporada alta) que hagan sus reservaciones con antelación para que no pasen un mal rato pues suelen visitarlos unos 20.000 turistas aproximadamente. Una buena manera es por bookings.com, el sitio es bien movido en cuanto a reviews y no cobran comisión por reserva. Nosotros nos quedamos en uno justo al lado del lago y cercano al centro, lo cual es ideal pues todo queda cerca.
En Pucón hay mucho por hacer a parte de subir el volcán. En la Libertador O'Higgins hay varias agencias de turismo con mil y un tours que ocuparán un par de horas, una tarde o todo el día, sólo deben planear sus actividades con algo de antelación para que no se queden en el hotel mirando el techo. Pueden hacer desde rafting hasta ski (este último sólo en temporada de invierno). Es cuestion de elegir lo que más te guste, opciones sobran. Igual nunca te alcanza el tiempo, la energia o el dinero para hacer todo esto. Si te sientes un poco más aventurero tambien puedes rentar un auto y hacer alguno de estos paseos por tu cuenta o incluso puedes llegar hasta Argentina pues la frontera esta a unos 70 km aproximadamente de Pucón, pero ojo, que no te dejan pasar con un auto alquilado, de ahi en adelante te toca a pie.
Lo mejor es conseguir un mapa (si no te facilitan uno en el hotel lo puedes conseguir en la municipalidad) y salir a conocer el lugar caminando o con una bici alquilada, como prefieras. Muy cerca estan La Poza y Playa Grande que son una especie de secciones del Lago de Villarica, de aguas frias y tranquilas. A veces se pueden ver grupos de patos retozando en la orilla y desde allí hay una hermosa vista del volcán.
Caminando un poco más esta el mirador del cementerio desde donde hay una vista panoramica de Pucón y del lago, pero por lo general desde donde mires tienes buenas vistas, un silencio que hipnotiza y aire tan puro que te haria toser. Ya en auto estan lugares como el mirador del río Turbio, del río Trancura, la Laguna Azul, los Ojos y el Lago Caburgua y muchas termas, la mayoría de estos sitios estan incluidos en los city tours, imperdibles.
En cuanto a la ascension al volcán, es el tour más costoso que pagamos pero el más gratificante, sin lugar a dudas. Este tour se contrata con al menos un dia de antelación para que recibas la inducción necesaria en cuanto a lo que debes hacer y llevar (food & stuff), así tienes tiempo de preparar todo. Desde muy temprano en la mañana comienza la aventura, asegurate de llevar dos capas de ropa encima que te mantengan bien caliente (al menos en invierno) pues las agencias de turismo solo te arriendan la ultima que es la que entra en contacto directo con la nieve. El resto de equipo (piolet, crampones, bastón, etc) viene incluido en el tour así que no incurras en gastos innecesarios. La ascension es lenta y no todo el año esta en funcionamiento el andarivel, lo que podría agregarle 1.5 km más a pie al asunto, así que si no te gusta caminar o la actividad fisica en general quizás esta no sea la más indicada para ti porque no es el Everest, pero creánme que cansa.
De aquí en más solo queda disfrutar de un maravilloso día, lleno de momentos increibles y paisajes hermosísimos y si corres con suerte y la nieve te lo permite, un descenso en skibunda o skiculo ^_^, algo con lo que te divertirás tanto que te sentiras un niño de vuelta. Toda una experiencia.
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